NUESTRO DESTINO

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“Estamos preparándonos para superar la barrera de nuestros propios conocimientos y vamos a llegar más allá de donde los demás han llegado”.

martes, 23 de agosto de 2011

HOMENAJE A TRES AMIGOS: IRIS ZABALETA, VICTOR PETIT Y JUAN CALDERÓN – GRACIAS POR SU LEGADO DE VIDA…


 
La Comunidad Educativa de la Institución Ismael Rodríguez Fuentes le rindió un merecido homenaje a tres personas que han formado parte de la familia Ismaelista. Estos tres amigos y compañeros son Iris Zabaleta, Víctor Petit y Juan Calderón, quienes al pasar por nuestra institución han dejado su huella indeleble en ella. Este evento se realizó el día viernes 19 de agosto del presente año, en el aula múltiple de nuestra institución. Los homenajeados estuvieron acompañados por sus familiares y amigos.






   







                                                                              




    







Durante la programación desarrollada, el profesor Antonio Rodríguez pronunció las palabras de agradecimiento a estos tres baluartes  de la educación; las cuales transcribimos textualmente porque expresa sabiamente nuestra gratitud por el legado de vida que nos han regalado: “La vida nos ha dado todo, Dios se encarga de abrazar la totalidad de la vida, porque la vida es Dios. Cada espacio, cada tiempo, cada minuto es obra de Dios. Cuando en los triunfos de la vida y en los avatares de la cotidianidad nos cuestionamos: ¿Qué he hecho yo con mi vida? –La respuesta es mi ser, tu ser, mi realidad, tu realidad: en pocas palabras decir lo que el siervo fiel le contesta a su señor: señor hice lo que tú me mandaste hacer. Construí en mi trabajo y por mi trabajo una familia, una generación que lleva la impronta, la marca, el sello indeleble del formador, que, de manera estoica y valiente, supera los óbices circunstanciales y se entrega a su segundo hogar: la escuela. Eso fue, es y será el papel del docente, que como el profesor Víctor Petit hizo. Entregó su vida por cada uno de sus alumnos, que como hijos, la familia molinera depositó en sus manos. Esa fue la misión que el señor Jesucristo te encomendó; y tenga la plena seguridad, profesor, que su tarea la realizó a la perfección. Y hoy, nosotros sus amigos le estamos diciendo muchas gracias por regalarnos buena parte de su vida. Gracias porque en usted encontramos un modelo de responsabilidad, de entrega, sacrificio y sabiduría. Créame, profe,   que en nombre de la comunidad educativa, usted superó con creces el reto que la vida le presentó. Lo mismo la compañera Iris, que con su temple de carácter y sonrisa maternal, supo ganarse el amor de esta comunidad educativa. En su fugaz momento aquí, nos hiciste recordar a las santas mujeres que acompañaron al Señor, en el momento álgido de su entrega. Tu presencia fue reconfortante. Siempre has tenido una respuesta jocosa y seria a los vaivenes laborales; aún te recordamos, eres ejemplo de disciplina, de constancia, de humor, trabajo y cariño. Iris, el llamado que hizo el señor a tu persona fue el servicio. Sírvele a la humanidad con amor y mantén en tus labios, en tu pensamiento, en tu voz, la célebre palabra de la sierva de Nazareth: “Aquí estoy señor para hacer tu voluntad; hágase en mí según tus palabras”.
Juan Bautista Calderón: “Pepe” quizás es más sonoro y cariñoso llamarte por tu popularidad. Te recordamos con alegría y tristeza; con alegría porque alegraste con tus chistes, con tu espontaneidad y presencia a esta comunidad que te quiere. Triste porque te fuiste; sin embargo, sentimos que no te has ido, porque tu abandono es tu felicidad y descanso. Vive tu vida con plenitud, y recuerda que aquí siempre tendrás tu familia que somos nosotros. El señor Jesús legó las llaves del cielo a Pedro para que fuera el centinela de la humanidad. A ti el señor te dio este trabajo para que vigilaras y cuidaras de este manojo de estudiantes y bienes del colegio. Lo hiciste bien y el trabajo te enseñó cómo ser cada día mejor para agradar a Dios.
Víctor, Iris y Pepe: emocionados, conmovidos y felices les decimos gracias a Dios por su existencia, que siempre el señor los bendiga y los tenga en bien”.


 


 



 





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